El acero inoxidable es un material de gran uso en el mundo de la construcción, debido a que es muy resistente y funcional, pero para que este tenga un acabado de calidad debe soldarse con mucho cuidado, por ello, hoy te vamos a enseñar todo sobre la soldadura de acero inoxidable.
La soldadura de acero inoxidable es el proceso mediante el que se unen varias piezas de este metal para crear vehículos de transportes u otros equipos; y para que se realice de forma adecuada se debe contar con el equipo de seguridad y los instrumentos adecuados.
El proceso para la soldadura de acero inoxidable es muy delicado, y debe hacerse con mucho cuidado y es por ello que en Soldaval contamos con las mejores herramientas y los expertos para hacerlo y en este post te explicaremos cómo es este proceso.
Tipos de soldadura de acero inoxidable
En Soldaval trabajamos con diversos métodos de soldadura que garantizan la seguridad y la efectividad del producto, ofreciendo acabados limpios y piezas fáciles de manejar.
Entre los tipos de soldadura con la que trabajamos están:
- Soldadura TIG: esta es una de las técnicas más utilizadas, debido a que ofrece un acabado más limpio. Es un proceso rápido y muy sencillo, donde la posición al momento de soldar no interviene en el acabado del producto.
- Soldadura MIG: es un proceso rápido y muy recomendado para estos casos debido a su seguridad, ya que la soldadura y arco crean una acción protectora en forma de envoltorio de gases de argón o helio.
- Soldadura SWAM: consiste en una soldadura manual de arco metálico, donde se utiliza un arco eléctrico de calor entre un electrodo revestido y el metal.
Aspectos importantes sobre la soldadura de acero inoxidable
Para que la soldadura de acero inoxidable tenga el acabado deseado se debe tratar con un material de alta resistencia, pero sobre todo con los conocimientos adecuados para manejar dicho material.
Es por ello que en Soldaval nos hemos tomado el tiempo para darte algunas sugerencias para trabajar mejor con el acero inoxidable, y te la presentamos a continuación:
Asegura el estado de la pieza
Para poder soldar el acero inoxidable, la pieza debe estar completamente limpia, ya que esto permitirá que se suelde mejor.
Lo ideal es limpiar la pieza por ambos lados con un cepillo de alambre para retirar toda la suciedad y rastros de óxido que pueda tener la pieza.
Temperatura del metal
Otro punto importante a la hora de soldar el metal es la temperatura a la que vas a someter el acero, ya que si no tiene el suficiente calor o si se pasa de calor se puede llegar a afectar la propiedad anti-oxidable del mismo.
Por ello, es primordial aplicar la cantidad de calor adecuada para la pieza con al que se está trabajando. Por lo general, el acero inoxidable de funde a una temperatura de 1000º C, pero puede variar dependiendo de la pieza.
Fija las piezas que vayas a soldar
Para que la soldadura quede mejor, lo ideal es fijar las piezas antes, esto te permitirá soldarlas sin que estas se muevan y así garantizar que los montajes sean más seguros.
Deshazte del flujo restante
Da el punto final a la soldadura eliminando el flujo restante, esto lo puedes hacer con agua caliente y con un cepillo de alambre. Asegúrate que no quede rastro de este flujo, ya que es corrosivo.