El proceso de soldar aluminio es uno de los más ejecutados en la calderería industrial, donde este material es utilizado para la creación de tubos u otras estructuras para vehículos.
El aluminio es uno de los principales materiales que utilizamos en Soldaval, ya que es muy resistente, seguro y liviano, además, sus acabados son impecables, por lo que puedes utilizar en una gran variedad de trabajos.
Sin embargo, para soldar aluminio y que esté tenga un buen acabado se debe tomar en cuenta algunos aspectos; por ello hoy nos hemos tomado la libertad de darte a conocer parte de estos aspectos.
¿Qué se necesita para soldar aluminio?
En el mundo de la industrialización, el aluminio tiene un lugar importante en la creación de diversos vehículos y otro tipo de estructura, debido a su propiedad conductora de electricidad.
Sin embargo, para que se pueda lograr un buen trabajo con el aluminio se debe tener en cuenta unos aspectos muy importantes y te los resumimos a continuación:
Equipos de soldadura
Para comenzar a soldar el aluminio lo primero que tienes que tener en cuenta es el equipo que vas a utilizar; este equipo debe estar en óptimas condiciones y que ofrezca seguridad tanto para el material como para la persona que lo va a estar operando.
En el proceso de soldadura del aluminio suele utilizar sopletes de butano de baja potencia, o en todo caso unas varillas a base de bronce o zinc, sin embargo, se puede por otro tipo de instrumentos.
Pero sin importa cuál vayas a usar lo importante es que esté equipo sea seguro y cumpla con los requerimientos necesarios.
Metales base ¿cómo prepararlos?
Lo siguiente que debes tomar en cuenta a la hora de soldar aluminio es la preparación del material que vas a utilizar, ya que para lograr un buen acabado la pieza tiene que estar en perfectas condiciones.
Por ello, debes asegurarte que la pieza de aluminio no tenga rastro de óxido de aluminio, o contaminación por hidrocarburos. En caso de que en su superficie algún rastro de óxido, se puede limpiar con un cepillo con cerdas de acero inoxidable.
Sin embargo, debes tener cuidado al momento de utilizar este tipo de herramienta, ya que si se le aplica mucha fuerza puede hacer que el óxido se incruste en el aluminio.
Temperatura de precalentamiento
Para moldear mejor el aluminio, primero debe pasar por un proceso de precalentamiento, ya que esto evitará que el material tenga alguna grieta.
No obstante, se debe ser muy cuidadoso a la hora de precalentar la pieza, ya que si se pasa de temperatura esta se puede sobre calentar y hacer más difícil su soldadura. Para que esto no ocurra, es recomendable utilizar un medidor de temperatura externo para llevar un control de la temperatura.
Elección de la técnica adecuada
Son muchas las técnicas que se utilizan para soldar el aluminio, donde cada una te ofrece sus pro y sus contras, por ello debes escoger la que más se adapte a tus necesidades.
Entre los tipos de soldadura que más se utilizan para soldar aluminio se encuentran:
- Soldadura por arco de tungsteno con gas (TIG)
- Soldadura por arco metálico con gas o MIG
- Soldadura por rayo láser
Las dos primeras ofrecen un arco de gas que protege la pieza contra oxidación y contaminación, y aplican un electro (de tungsteno en primer caso) que permite una mejor fusión del metal y que la unión sea más resistente.
Mientras que la tercera, utiliza un rayo láser de alta potencia para unir las piezas y que quede un acabado único y muy sutil.
En Soldaval contamos con personal especializado en todo el proceso de soldadura del aluminio, además de herramientas de calidad y muy seguros que te darán el acabado que estás buscando, así que no dudes en contactarnos.